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Intimidades del Consejo Superior en el que Carlos Prasca fue elegido rector

La ministra Yaneth Giha tomó el control de la reunión y no permitió gritos ni dilaciones de la tensa sesión.

José Granados Fernández

Tras 2 años y 9 meses de interinidad, que comenzaron en septiembre de 2014 con la salida de la rectora titular Ana Sofía Meza, a quien le tramitaron la jubilación de manera exprés, la Universidad del Atlántico volvió ayer a tener rector en propiedad: el Consejo Superior eligió y de inmediato fue posesionado Carlos Prasca Muñoz, licenciado en biología y química egresado de esta alma mater, especialista en gerencia de la calidad de la Universidad del Norte y magíster en administración educacional de la Universidad del Valle.

La elección fue un proceso traumático que comenzó el pasado 7 de mayo cuando el Consejo de Estado dio luz verde para elegir rector. Entonces al interior del Consejo Superior, como lo informaron oportunamente Atlántico en Noticias y Zona Cero.com, comenzó una aguda puja en la que las recusaciones, demandas, indecisiones, consultas, señalamientos, componendas y otros obstáculos estuvieron en el orden del día.

Ayer, con la intervención de la ministra de Educación, Yaneth Giha, en aproximadamente hora y media fue superado el que había sido calificado por la opinión pública como un “vergonzoso espectáculo electoral” ante los aplazamientos forzados.

Desde la noche del jueves la ministra Giha se instaló en Barranquilla, su tierra natal, con el objetivo de sacar adelante la elección. A la Gobernación llegó ayer pasada las 2 de la tarde para asistir a la reunión del Consejo Superior citada para las 3.

La sesión comenzó en medio de una evidente tensión producto de lo que había sucedido ocho días atrás, cuando ni siquiera dejaron entrar al representante del Comité Intergremial César Lorduy y en las dos rondas de votaciones ninguno de los 3 candidatos, Rafael Castillo, Carlos Prasca y Salim Mattar, logró los 5 votos necesarios para ser elegido.

La tensión también era producto del anuncio que, horas antes en Atlántico en Noticias, había hecho el gobernador Eduardo Verano. El mandatario había admitido que el llamado bloque institucional, conformado por el Gobierno Nacional y la Gobernación del Atlántico, votaría por Prasca; su anuncio se sumó a un hecho inesperado surgido la tarde-noche del jueves: una medida cautelar concedida por el Juez Noveno de Familia ordenó que le permitieran a Lorduy participar en el Consejo Superior como representante del Intergremial.

Luego de que el secretario del Consejo Superior, Moisés Avilés, leyera el orden del día, comenzó un debate de parte de los postuladores de Castillo, es decir el representante de los estudiantes, Jonathan Camargo, secundado por su suplente Jesús Orozco, y el delegado de los profesores, Roberto Figueroa, apoyado por su suplente Jorge Ahumada. Comenzaron a expresarse sobre el orden del día en sí; la tutela y la medida cautelar de Lorduy; la elección en el tercer punto del orden del día e intentaron dilatar la sesión debatiendo sobre si el Gobierno Nacional y la Gobernación formaban el verdadero bloque institucional al interior del Consejo.

En medio de una intervención de Camargo, la ministra Giha, pese a no ser la presidenta del Consejo Superior pero debido a que a ella iban dirigidos los reclamos, mostró su temple con la mayor decencia. El representante de los estudiantes vociferaba, ante lo cual la ministra le manifestó que no tenía que alzar la voz para que ella y los demás lo escucharan; Camargo le respondió que él hablaba así y la ministra Giha le insistió en que no era necesario gritar para expresar sus argumentos. Desde ese momento Yaneth Giha se plantó y mostró que no estaba dispuesta a soportar las actuaciones bochornosas y oprobiosas de otras sesiones del Consejo Superior.

Tan alto como el tono de Camargo fueron los de Figueroa y Ahumada, mientras que Orozco lanzó una diatriba contra la política educativa, pero todo quedó en meros reclamos.

En otro momento, los representantes de los estudiantes y los profesores, tratando de meterle más palos a la rueda de la elección, dijeron que debían retomar la proposición de Verano, presentada en la sesión anterior, sobre si el Consejo Superior quería seguir con el proceso eleccionario con los 3 candidatos inscritos o si debía terminarse. Antonio Vallejo, representante de los ex rectores y postulante de Mattar, dijo que mientras esa propuesta estuviera en la mesa debía ser resuelta, ante lo cual la ministra Giha y Lorduy le propusieron al gobernador que la retirara y este lo hizo.

El fin de la sesión estaba cerca. Giha y Lorduy propusieron entonces iniciar la votación. Cuando el secretario Avilés comenzó el proceso, los postuladores de Castillo preguntaron de manera beligerante que cuál era la prisa, pero ya nada podía detener la elección: el primero en hacerlo fue Wilson Annichiarico, representante de las directivas académicas, quien votó por Rafael Castillo; después, en su orden, votaron Leyton Barrios, representante de los egresados; César Lorduy; el gobernador Verano; la ministra Giha y la viceministra de Educación, Natalia Ruiz, por Carlos Prasca, con lo cual este quedó de inmediato elegido al lograr los 5 votos necesarios. Vallejo votó por Mattar; Camargo y Figueroa lo hicieron por Castillo.

De esta manera, en menos de un minuto, quedó resuelto un proceso que llevaba 105 días, desde que el Consejo de Estado levantó la medida cautelar para la elección. Al final, Verano terminó fundido en un abrazo con Prasca, a quien no quería elegir, y hasta Lorduy y Camargo se fumaron un cigarrillo juntos, dejando atrás el tropel de 3 largos meses.

Ahora lo que todos esperan es que Carlos Prasca enrute la Universidad del Atlántico por el camino de la academia, en beneficio de sus más de 24 mil estudiantes, y que esta deje de ser el botín de grupos y grupitos politiqueros, tanto de partidos tradicionales como de la izquierda.
 

 

 

 

 

 

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